Santo Domingo. Entre a la sala de cine con la premisa de que vería una comedia dramática , pero al salir de la sala no podía describir las emociones que la cinta generó en mi.
Estoy hablando de A Real Pain, una película que tiene una narrativa simple, pero melancólico, con unos planos generales que parecen pinturas de artes, que se paralizan el tiempo suficiente para que aprecies la magnitud de lo que la cinta quiere transmitir, además de una musicalizacion que evoca a la emotividad y es que más allá de la historia, tomar como escenario Polonia y el tema del holocausto, de una u otra forma te hace recordar y reflexionar una de las etapas más oscuras de la humanidad.
Dirigida y protagonizada por Jesse Eisenberg y Kieran Culkin, la cinta narra la historia de dos primos que viajan a Polonia tras la muerte de su abuela para ver dónde vivió ella antes de la II Guerra Mundial y comprender de dónde viene su familia, incorporándose ambos a un tour sobre el holocausto.
Matices
He de reconocer que en principio Benji, el personaje protagonizado por Culkin me pareció un poco molesto, sin embargo a medida que avanza la trama mi perspectiva cambió, la dualidad de su personaje, dependiendo de cómo lo mires, creo es lo que más peso le da a la película.
Sus gestos, lo que transmite con solo verle la cara y si prestas bastante atención, algunos tic que manifiesta , que son característicos de una persona con depresión, son suficiente para darte cuenta que detrás de ese comportamiento explosivo hay una persona que necesita ayuda, una persona que carga con una pena y un dolor que quizás lo demás no pueden entender y es que vaya , que merecido se tiene Culkin haber ganado ese Globo de Oro y estar nominado a los Oscar como mejor actor de reparto, su actuación es mucho con demasiado.
Hay tres escenas que se quedaron en mi mente, la de goma roja de Benjin y como la utiliza para calmarse, la del tren , que me hizo cuestionarme algunas cosas y la del aeropuerto al final , cuando vean la película quizás entiendan a que me refiero.
Pero no podemos dejar atrás el personaje de David (Eisenberg), siendo todo lo opuesto a Benji, alguien más centrado , que comprendió que no te puedes quedar estancando en el sufrimiento, que debes seguir adelante, sin quitar que también sufre a su manera.
Cargada de muchos matices emocionales, “A Real Pain” es la definición visual más clara de cómo dos personas que se crían con los mismos valores y atraviesan por una misma situación enfrentan el dolor y la perdida de forma tan diferentes.
Además, la película cuenta con otros personas que también están o han atravesado por situaciones difíciles, y es que así es la vida, con sus altas y bajas.
El viaje de estos dos primos es un reencuentro con su cultura, con su dolor, con su vida familiar, es un espacio para reproches, para reconectar, pero sobre todo para reconocer que aveces no todo el que sonríe está bien, es un llamado de atención a observar y a estar presente, pero también a que debemos continuar.