Santo Domingo,. – En los últimos años, el cine dominicano ha experimentado un crecimiento notable, tanto en volumen de producciones como en proyección internacional. Sin embargo, detrás de cada plano perfectamente iluminado y cada toma cuidadosamente capturada, existe una estructura técnica que sostiene ese avance. Una de las piezas clave en ese engranaje es el acceso a equipos de última generación, un vacío que Rufiosa ha venido a llenar desde 2022.
Fundada por el joven empresario Antonio Alma Turull, Rufiosa es una empresa dedicada a la renta de equipos cinematográficos de alta gama, ofreciendo servicios que van desde el alquiler de cámaras profesionales, lentes y luces, hasta soluciones integrales de postproducción y cobertura de eventos. Su misión es clara: profesionalizar y facilitar el acceso a tecnología audiovisual avanzada para las producciones locales.
“Nacimos de la necesidad del mercado”, afirma Antonio. “Nos dimos cuenta de que en el país existía una demanda creciente de equipos de alto nivel para producciones cada vez más ambiciosas. Con Rufiosa, buscamos brindar un servicio profesional, accesible y honesto, con la tecnología más actualizada y el conocimiento técnico que nos permite asesorar a nuestros clientes según sus necesidades reales”.
Una oferta pensada para la industria local
Rufiosa cuenta con un catálogo competitivo que incluye cámaras RED —como la nueva RED Komodo X—, lentes Compact Prime y Compact Zoom, drones, grips y una gama completa de soluciones de iluminación. A esto se suman dos salas de edición totalmente equipadas y un área de postproducción que permite dar continuidad a los proyectos desde la grabación hasta la entrega final.
Antonio resume la amplitud de sus servicios señalando que cubren «todo lo que tenga que ver con una cámara». Explica que realizan comerciales, coberturas de eventos, grabaciones para el sector de la construcción y transmisiones en vivo, entre otros. Además, ofrecen soporte a producciones de ficción, documentales y videoclips, asegurando estar listos para asistir desde un cortometraje estudiantil hasta una producción de alcance internacional.
Un motor silencioso para la profesionalización del cine dominicano
Aunque los reflectores suelen estar sobre actores y directores, empresas como Rufiosa juegan un rol vital en la evolución de la industria. Su impacto se percibe en la mejora sustancial de la calidad visual de los proyectos y en la reducción de barreras logísticas y económicas para muchos creadores.
Antonio destaca que el acceso local a equipos de primer nivel elimina la dependencia de envíos internacionales y los altos costos de importación para las productoras. Esto, según él, permite que más cineastas sueñen en grande, liberados de limitaciones técnicas.
Además del servicio técnico, Rufiosa también se ha convertido en un espacio de asesoría y colaboración. “Cuando alguien llega buscando un equipo, nosotros no solo se lo alquilamos. Evaluamos con ellos qué necesitan realmente para que su rodaje sea exitoso. Es un acompañamiento personalizado que aporta mucho valor al proceso creativo”.
Mirando al futuro
Con la industria dominicana consolidándose como un referente regional, empresas como Rufiosa SRL se proyectan como aliados esenciales en la cadena de valor del cine. La visión de Antonio y su equipo es seguir creciendo junto al sector, incorporando más equipos, ampliando su oferta en postproducción y eventualmente brindando formación técnica para nuevos talentos.
“El cine es una industria que puede transformar economías, comunidades y realidades. Pero para que eso pase, necesitamos bases sólidas. Nosotros queremos ser parte de esas bases, aportando lo que mejor sabemos hacer: servicio técnico de calidad, trato profesional y pasión por contar historias con las mejores herramientas”, concluye.